LRV es el acrónimo de Valor de Reflexión de la Luz en inglés (Light Reflectance Value). Aquel valor corresponde a la cantidad total de luz, visible y utilizable, reflejada en todas las direcciones y longitudes de onda por una superficie, cuando está iluminada.
¿Cómo funciona?
LRV funciona en una escala de 0 a 100%, siendo cero el negro absoluto y 100 un blanco perfectamente reflectante. Estos dos extremos son puramente teóricos, ya que el negro más oscuro alcanza generalmente un valor del 5% y el blanco más inmaculado el 85%. Algunos amarillos también pueden alcanzar el 80-90%.
Por debajo del punto medio del 50%, el color tiende a absorber más luz de la que reflejará en la habitación. Por el contrario, con un LRV superior al 50%, reflejará más luz de la que absorbe. En resumen, cuanto más alto es el valor, más claro es el color.
¡Cuidado con el amarillo!
En la práctica
La norma EN 12464-1 recomienda el siguiente intervalo para las principales paredes de los locales:
En la práctica se recomiendan los siguientes valores predeterminados:
¿Para qué sirve el LRV?
Es bastante útil también para lo que se refiere al ahorro de energía. Las normas medioambientales de la construcción actualmente en vigor, como la etiqueta HQE, por ejemplo, incorporan los factores de reflexión de la luz en su marco de referencia. En las especificaciones de algunos proyectos, el LRV requerido puede ser superior al 20%, con el fin de reducir al máximo el consumo eléctrico necesario para la iluminación.
Los suelos textiles de colores claros TecSOM ofrecen un LRV muy alto y reflejan bien la luz, favoreciendo así el ahorro de energía. Todas las colecciones están fabricadas con hilos teñidos en la masa, lo que permite obtener una alta resistencia de los colores, incluso de los más claros que son más frágiles, y garantiza la belleza del producto durante muchos años.